por Otávio Calegari

Hace pocos días el gobierno de Gabriel Boric comunicó la exclusión de empresas israelíes de la FIDAE, Feria Internacional del Aire y del Espacio. La FIDAE es una feria organizada por la Fuerza Área de Chile para promover el mercado de tecnologías relacionadas al ámbito aéreo comercial y militar. A partir de su decisión, algunos ex ministros de Defensa como Jorge Burgos (Bachelet), Mario Desbordes (Piñera), Jaime Ravinet (Piñera) salieron a cuestionarla. Los tres exministros destacan la importancia estratégica de las relaciones entre las FFAA de Chile y las empresas públicas y privadas de Israel y califican la decisión de Boric como “riesgosa” e incluso “irresponsable”.[1] Entendamos el porqué.

Israel, una potencia bélica

Desde 1948, año de su fundación, el Estado de Israel ha invertido, siempre financiado por las potencias capitalistas como Gran Bretaña y Estados Unidos, gran parte de su presupuesto en armamentos y tecnologías militares.[2] Esto porque su propio nacimiento y mantención como Estado artificialmente creado en el Medio Oriente solo pudo darse debido a las distintas guerras que libró contra Egipto, Jordania, Líbano, Siria y otros países de la región. La historia de Israel es una historia de guerras, además de estar construida sobre la limpieza étnica del pueblo palestino.

En las últimas décadas, además de las tecnologías militares “convencionales”, Israel desarrolló un potente sector de tecnologías relacionado a la vigilancia y control. El campo de “testeo” de sus tecnologías es el pueblo palestino. Desde la Guerra de los Seis Días, en 1967, Israel mantiene ocupada la Cisjordania, histórico territorio palestino y mantiene el cerco a la llamada Franja de Gaza, hoy bajo invasión. En Cisjordania y en ciudades como Yenín, Hebrón, Jerusalén y muchas otras, Israel sostiene un verdadero apartheid y una vigilancia constante sobre los palestinos. Son conocidos mundialmente los llamados check points o puestos de control de Israel en cada ciudad palestina, donde los palestinos deben pasar todos los días para ir a trabajar, ir al supermercado, visitar a sus familiares, etc. Israel ha desarrollado tecnologías de reconocimiento facial muy avanzadas para poder controlar el movimiento de cada palestino y palestina y posee una base de datos con prácticamente todos los que habitan en Cisjordania. Vivir en Cisjordania ocupada es como vivir en una prisión, con soldados israelíes por todas partes, cámaras, armas automáticas y puestos de control.[3]

Así, por la opresión y represión constantes a los palestinos, Israel se ha transformado en un poderoso Estado que tiene como su principal negocio la venta de tecnologías militares y armamentos. Para que se tenga idea, Israel es el segundo país del mundo a invertir en el sector militar en relación a su población (2,500 dólares por año por cada habitante, solo quedando atrás de Qatar y por delante de Estados Unidos). En la última década, la exportación de productos bélicos de Israel a otros países ha superado su importación. Además de eso, Israel recibe miles de millones de dólares de “ayuda” de Estados Unidos para el sector militar (más de 120 mil millones de dólares en las últimas 7 décadas).[4]

Así, Israel se ha transformado en un importante proveedor de tecnologías y armamentos para muchos países del mundo, incluido Chile. Sus “empresas de punta” se desarrollan sobre la opresión y represión a los palestinos.

Chile e Israel

La relación entre el Estado de Chile y el Estado de Israel es antigua, partiendo con el reconocimiento de Israel por parte del Estado chileno en 1949. Durante las últimas 7 décadas, Chile ha firmado innumerables acuerdos con Israel en los ámbitos comerciales, diplomáticos, tecnológico, científico y militar.[5] La dictadura militar fue una gran importadora de armas y tecnología militar de Israel.

La relación se profundizó aún más en democracia. En los gobiernos de Sebastián Piñera, los acuerdos militares se ampliaron, con la firma del Memorándum de Entendimiento para la Cooperación Bilateral en Defensa (2011) y posteriormente con varios nuevos acuerdos en el área de seguridad en 2019. Durante el proceso revolucionario de 2019, Piñera gastó más de 10 mil millones de pesos en importar vehículos de Israel (como el Sandcat PVT)[6]para las Fuerzas Especiales de Carabineros, que en ese entonces estaban literalmente sacando los ojos a cientos de jóvenes que protestaban.

Esa “colaboración” no existe solo en Carabineros, sino en el conjunto de las Fuerzas Armadas de Chile, que tiene varios programas de intercambio con las FFAA de Israel, enviando oficiales a Israel y recibiendo a militares israelíes en Chile. En los últimos años, las FFAA de Chile gastaron más de 220 millones de pesos en capacitaciones para militares chilenos con instituciones israelíes. El Ejército chileno ha importado decenas de productos de origen israelí, como cascos, drones, lanchas, defensas antimisiles, chalecos antibalas, ametralladoras UZIs (que son usadas en el Wallmapu), pistolas, etc.

Otro sector donde hay estrechas relaciones entre el Estado chileno e Israel es el de ciberseguridad. Se han realizado varias capacitaciones a militares chilenos por la empresa Elbit Systems, especialista en ciberseguridad. Chile ha comprado drones de vigilancia y softwares israelíes de espionaje. Estos aparatos sin duda han sido utilizados para tomar detenidos a muchos compañeros y compañeras en las manifestaciones.

En el caso de la feria FIDAE, podemos confirmar lo que dijimos anteriormente: que las empresas que vienen a presentar sus tecnologías en Chile son empresas de seguridad que utilizan al pueblo palestino como “laboratorio” para sus tecnologías. La empresa Camero-Tech, por ejemplo, dice proveer tecnologías que permiten “ver a través de las paredes”.[7] Otra empresa, Dagan Optics, vende avanzadas tecnologías militares con detección de imágenes a partir del calor, sensores de distintos tipos, cámaras, etc. Podríamos citar varios otros ejemplos, bastaría investigar un poco cada una de las empresas que se “molestó” después de ser excluidas de la FIDAE. Todas esas empresas tienen profunda relación con las Fuerzas Armadas de Israel.

Por todo lo señalado anteriormente es que los exministros de Defensa de Chile califican la relación entre Chile e Israel como una relación estratégica. Cuando hablan de estratégica, están hablando a nivel del Estado burgués, más allá de un gobierno de “derecha” o “izquierda”. El Estado de Israel provee tecnología y aparatos militares fundamentales para que las FFAA chilenas puedan reprimir al pueblo mapuche y al pueblo chileno cuando este se levanta contra las desigualdades y el abuso, como sucedió en 2019.

Boric debe romper todas las relaciones con el Estado de Israel

La medida tomada por Boric de no permitir la exposición de empresas israelíes en la FIDAE es una medida progresiva, pero totalmente insuficiente. Esta medida no puede ser analizada de forma aislada y superficial. El gobierno sigue manteniendo las profundas relaciones del Estado chileno con el Estado de Israel. Por ejemplo, en Chile hay un “agregado militar” de Israel de manera permanente paseándose por las FFAA chilenas, Amit Guy.[8] La profunda relación entre Chile e Israel es un reflejo de la subordinación de Chile a Estados Unidos, el principal aliado y sostenedor de Israel.

Las acciones de Boric son totalmente insuficientes para lo que se requiere. El genocidio[9] realizado por Israel ya ha dejado más de 30 mil muertos reconocidos oficialmente, 1,5 millón de refugiados y hoy miles de personas corren el riesgo de morir de hambre. La Franja de Gaza está casi completamente destruida.

Exigimos que el gobierno expulse inmediatamente el agregado militar de Israel en Chile y rompa todas las relaciones con el Estado genocida de Israel. Solo de esta manera, con acciones efectivas y no simbólicas, se podrá hacer presión para que Israel detenga el genocidio en la Franja de Gaza.

Es necesario fortalecer las movilizaciones por Palestina en todo el mundo. En Chile, invitamos a todos y a todas a sumarse a las grandes marchas convocadas para el 17 de marzo en Santiago y 23 de marzo en todo Chile.


[1] Ver https://digital.elmercurio.com/2024/03/07/C/TT4DA2GL#zoom=page-width

[2] Para la fundación del Estado de Israel uno de los países que proveyó la mayor parte del armamento fue la Unión Soviética bajo el liderazgo de Stalin.

[3] Ver el documental de Al Jazeera sobre Hebrón en https://www.youtube.com/watch?v=B1RNj8FXKqY&ab_channel=AlJazeeraEnglish

[4] Ver https://www.aljazeera.com/news/2021/6/4/infographic-what-you-need-to-know-about-israels-military

[5] Ver https://www.chile.gob.cl/israel/relacion-bilateral/acuerdos-y-tratados-bilaterales/acuerdos-y-tratados-bilaterales

[6] Ver https://interferencia.cl/articulos/pinera-es-el-gobernante-que-mas-insumos-belicos-y-policiales-ha-comprado-israel-desde

[7] Ver https://camero-tech.com/company-overview/ / http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_7748000/7748451.stm

[8] Ver https://www.elmostrador.cl/noticias/pais/2024/03/06/embajador-de-israel-que-sentido-tiene-tener-agregado-de-defensa-en-chile-tras-nuevo-acto-hostil/

[9] Hablamos de “genocidio” y no de “guerra”, como los grandes medios de comunicación. Esto porque lo que hace Israel es atacar indiscriminadamente al pueblo palestino, buscando su eliminación y expulsión masiva de su territorio, práctica caracterizada internacionalmente como “genocidio” (exterminio o eliminación de un determinado grupo humano por cuestiones étnicas, religiosas, de nacionalidad, etc.).

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