Lo decimos con dolor y rabia, rabia porque sabemos que su partida no es parte de la casualidad, sino que es producto del genocidio que están cometiendo distintos gobiernos del mundo al no combatir realmente la pandemia del coronavirus. El gobierno de Duque es responsable así como lo es Piñera en Chile. Por no frenar los negocios del empresariado están arrastrando a buena parte de la humanidad a la muerte. ¡Este sistema no puede seguir así!
Desde el MIT, en honor a nuestro compañero Óscar Ángel y a todos los caídos, seguiremos levantando la bandera de la revolución socialista internacional. No nos cansaremos aunque en ello se nos vaya la vida, pues el capitalismo mata y no podemos quedarnos de brazos cruzados ante esa realidad.
Varios de nuestros compañeros tuvimos la fortuna de conocer a Óscar Ángel, en Congresos internacionales y también en instancias de distensión. Sabemos que no solo perdimos a un cuadro, sino a una gran persona, alegre, simpática y con una increíble energía.
¡Compañero Óscar Ángel, PRESENTE!