Fue el primer preso político desde la revolución del año pasado que ha sido condenado en chile. Carlos es padre de dos pequeños hijos, a los que por el accionar del Estado empresarial, le es imposible ver como crecen o poder abrazar y sentir sus corazones. Fue detenido la noche del lunes 2 de diciembre y automáticamente criminalizado. Luego de más de 5 meses de prisión preventiva el 19 de mayo pasado quedó condenado a 3 años y un día, en la cárcel de Concepción. Sin embargo, Carlos no baja los brazos y sacó un comunicado denunciando el actuar de este gobierno y defendiendo la protesta social.